River andaba por una autopista alemana, sin límite máximo de velocidad, tras su exhibición frente a Aldosivi, y de pronto desaceleró bruscamente y casi casi se da un tortazo frente a Internacional de Porto Alegre en la noche del martes en el Monumental de Núñez.
Claro que la actuación y el resultado (2-2) del próximo rival de Atlético se dio en un contexto peculiar, en un partido que de por si se asemejaba a un “accidente” en el calendario para un equipo que suele rendir mejor cuando las “papas queman”.
Está muy cerca el doble choque de cuartos de la Copa Superliga con el “Decano” y no demasiado lejos la final de la Recopa Sudamericana ante Atlético Paranaense.
River activó el "Plan C" para el viaje a TucumánAsí las cosas, el “Muñeco” volvió a armar una suerte de “rejuntado”, que de no ser por el error-horror del arquero Marcelo Lomba y el oportunismo de Lucas Pratto en la agonía del partido, hubiera dejado a River con sabor (todavía más) amargo en una noche con hinchas exigentes y fastidiosos en las gradas, y que entregó varias certezas y despertó unas cuantas dudas.
Sin los preservados Lucas Martínez Quarta y, sobre todo, Javier Pinola, la defensa es zona liberada. Exequiel Palacios, de buen primer tiempo y exquisita asistencia en el gol de vaselina de Julián Álvarez, está recuperando el nivel que motivó que el Real Madrid posara sus ojos en él. Pratto, más allá del gol, nunca te deja “a gamba”. Además, Franco Armani hizo lo imposible para que Esteban Andrada se adueñe del arco argentino en la Copa América.
El River que visitará el sábado el Monumental tucumano pondrá otras firmas en la planilla. Repetirán Armani, probablemente Robert Rojas (Lucas Martínez Quarta está suspendido), Fabrizio Angileri y Pratto. Quizá Nicolás de la Cruz. Volverá Rafael Santos Borré. También Enzo Pérez e Ignacio Fernández. Ya no estarán los juveniles del Sub 20. Habrá que ver cómo decide armar el mediocampo el entrenador: ¿Bruno Zuculini o Leonardo Ponzio? ¿Palacios esperará en el banco la oportunidad de jugar en su provincia natal?
Por otra parte, en la enfermería recibió el alta Matías Suárez, que probablemente vaya al banco de suplentes el sábado. Y una mala es que Gonzalo Montiel terminó con molestias en el cuadriceps y es duda.
El River de Gallardo, en el “José Fierro”, intentará retornar a la autopista por la que venía tan bien.